La Renovación en el Espíritu Santo
¿Cómo surgió la Renovación Carismática en el Espíritu?
La Renovación Carismática emergió en la Iglesia Católica en un momento en que se buscaban formas de poner en práctica la “Renovación de la Iglesia” deseada, ordenada e inaugurada en el Concilio Vaticano II.
Podemos afirmar que esta Renovación, inspirada por el Espíritu Santo en nuestra Iglesia, fue una respuesta a la oración del Papa Juan XXIII y del Concilio. Es por eso que el Cardenal Suenens la describió como “una segunda gracia de Dios para la Iglesia y el mundo”, después de la primera gracia que fue el Concilio Vaticano II. Mientras que el Concilio fue una gracia del Espíritu Santo a nivel de los obispos, la Renovación es una gracia pentecostal eclesial a nivel de la “Gran Comunidad Cristiana”.
CONTINENTES
Millones en todo el mundo
Mil Grupos de Oración
AÑOS
Aquí están los momentos más destacados en el nacimiento de la Renovación:
- En agosto de 1966, un año después de la clausura del Concilio, en la Universidad de Duquesne en Pittsburgh, Pennsylvania, un grupo de profesores leyó el libro “La Cruz y el Puñal” de John Shrill sobre el ministerio de David Wilkerson entre los drogadictos de Nueva York. Mientras lo leían, sintieron una creciente inquietud.
- Durante el otoño de 1966, varios hombres católicos que eran miembros de la Universidad se reunieron regularmente para momentos de oración fervorosa. A pesar de haber dedicado años al servicio de Cristo y participar en diversas actividades apostólicas, sentían que algo faltaba en su vida cristiana personal. Experimentaban un vacío, una falta de dinamismo y una debilidad espiritual en sus oraciones y actividades.
- Conscientes de que la comunidad cristiana primitiva experimentó el derramamiento del Espíritu Santo en Pentecostés, comenzaron a orar para que el Espíritu Divino se manifestara en ellos, llenando sus vidas espirituales y su trabajo apostólico con su presencia llena de poder.
- Así comenzaron a orar diariamente unos por otros recitando la oración “Ven, Espíritu Creador”. En febrero de 1967, recibieron el bautismo en el Espíritu Santo y comenzaron a hablar en lenguas. En ese mismo mes, del 17 al 19, unas treinta personas participaron en un retiro de fin de semana llamado “El Retiro de Duquesne”. Pasaron todo el sábado 18 en oración y estudio. Por la noche, oraron para recibir el bautismo en el Espíritu Santo, y muchos de ellos experimentaron una transformación interior y la manifestación de los dones del Espíritu Santo, confirmando que sus oraciones habían sido escuchadas.
- Experimentaron una especie de “Pentecostés personal y comunitario”. Así nació la Renovación Carismática Católica, gracias al impulso irresistible del Espíritu Santo, propagándose como fuego sobre la paja y llegando a los cinco continentes.
En nuestra ciudad de Chicago,
la Renovación Carismática llegó hace 50 años
En nuestra ciudad de Chicago, la Renovación Carismática llegó hace 50 años, y damos gracias a Dios por los hermanos que fueron instrumentos para llevarnos este fuego del Santo Espíritu. Actualmente, la Renovación ha crecido en más de ochenta comunidades de habla hispana y entre los jóvenes. En estas comunidades, se predica con poder la Palabra de Dios, y se puede ver claramente cómo su amor se derrama sobre nosotros a través de sanaciones espirituales y físicas, liberaciones, entre otros dones.
La Renovación Carismática no es una moda pasajera, sus frutos se manifiestan de inmediato. Es una poderosa acción espiritual que transforma vidas, no solo en términos de “reavivamiento”, sino como una verdadera “renovación”, un rejuvenecimiento y una actualización de nuevas posibilidades que surgen de la Iglesia, que es “siempre antigua y siempre nueva”.
La Renovación en el Espíritu Santo no se aparta de las instituciones que gobiernan la Iglesia, sino que cree en ellas y se somete a ellas.